A veces por reducción de personal, otras por despido directo la pérdida de empleo es una de las situaciones más estresantes en la vida del ser humano. Como toda pérdida lleva su tiempo elaborarla y salir de ella para poder generar una nueva estrategia de vida.
Duelo por la pérdida de empleo
El duelo es un proceso emocional que atravesamos las personas frente a una pérdida. Este proceso no es lineal, (cuenta con altibajos) y lleva a la aceptación de la situación para construir una nueva realidad.
¿Cuáles son las etapas del proceso?
- Negar la realidad: creemos que se trata de una equivocación. Algunos ejemplos: “El jefe va a recapacitar”, levantarse al otro día para ir a trabajar, etc.
- Enojo: hacia el lugar de trabajo, jefes, compañeros, etc.
- Tristeza: Dolor por la pérdida.
- Sentirte culpable: Sensación de ser mala persona por lo cual eres castigado.
- Miedo: a no conseguir un nuevo empleo y no poder hacer frente a las responsabilidades.
- Ansiedad: Insomnio, pérdida o aumento de apetito, nerviosismo.
- Aceptación (resolución): de lo ocurrido, plantearse nuevos retos. Tener una visión a futuro más realista.
¿Como enfrentar el duelo?
- Hablar sobre el tema: evitarlo o “hacer como que no pasa nada” puede acrecentar el dolor y hacer más difícil la aceptación.
- Acercarte a personas que te escuchen y validen lo que sientes. Quizás quienes estén o hayan pasado por esta situación.
- Estar atento a nuevas fuentes de empleo. Avisarle a todos los conocidos por la situación que atraviesas. Ponte a las órdenes.
- Mejorar tu currículum. Busca información de cómo hacerlo. No olvides colocar en el todas las experiencias y habilidades que tengas. Siempre que aporten al cargo que te postulas.
- Aprovecha el uso de las redes para promocionarte.
- Visualiza en qué eres bueno para poder emprender. La pérdida de empleo puede ser una oportunidad para plantearse un cambio y trabajar para uno mismo. Piensa en qué te destacas, qué te gusta, habla con otros si es necesario.