¿Cómo subir las defensas? El sistema inmune (tu sistema de defensas) es el encargado de cuidar tu cuerpo y liberarte de todo lo que es extraño a él y amenaza tu salud: hongos, parásitos, virus, bacterias, células tumorales, etc. Es el encargado de reconocer qué cosas no corresponden estar en tu cuerpo generando una respuesta para expulsarlas.
Cuando algo extraño aparece en tu cuerpo un mensaje es enviado al cerebro poniendo en marcha un proceso de ahorro de energía (necesario para llevar a cabo su función) con el objetivo de combatir al intruso. En consecuencia te sientes mal, desganado y puede que tengas fiebre. El cuerpo se encuentra en estado de alarma, y esta indica que debes colaborar con este proceso, descansando, ahorrando la mayor cantidad de energía posible.
Muchas veces sucede que no le haces caso a lo que tu cuerpo te está indicando. Déjame decirte que esto empeora las cosas, probablemente necesites medicación para contrarrestar los efectos.
¿Qué cosas interfieren en el correcto funcionamiento del sistema inmune?
Cuando estás estresado prevalece un continuo estado de insatisfacción de necesidades, junto a un sentimiento de pérdida de control de la situación.
En un artículo anterior te expliqué cómo el estrés crónico debilita tu sistema de defensas.
Algunas de las necesidades insatisfechas pueden ser en la alimentación, el sueño, momentos de relax, de socialización, de ejercicio, de protección, habitacionales, etc.
En consecuencia nuestro sistema de defensas debilita las fuerzas para luchar contra los agentes extraños.
Esto va más allá de lo genético. Los estilos de vida, el manejo de las emociones (entre otros) son cruciales a la hora de hablar de enfermedad o de salud y por ende de tus defensas.
¿Qué cosas hacer para fortalecer y subir las defensas?
- Presta atención a tu descanso por las noches. Trabaja en la higiene del sueño.
- Ocúpate de tener una alimentación equilibrada.
- Conócete, visualiza que cosas te hacen bien, y hazlas.
- Deja en tu vida un lugar para el disfrute y el relax.
- Haz ejercicio, muévete. El ser humano necesita moverse.
- Vive el “aquí ahora” no te angusties con cosas que no han pasado aún y quizá nunca sucederán.
- Júntate con personas que te hagan bien. Estar con otr@s libera sustancias de bienestar en tu cuerpo (entre otras oxitocina) que amortiguan el estrés.
- Aprende a poner límites.
- Aprende a decir NO cuando lo creas conveniente.
- Cuida tus pensamientos.
A veces corres porque quieres tal o cual cosa y vas dejando en el camino momentos, situaciones y personas que realmente te hacen feliz. Estas son las cosas que realmente contribuyen a tu bienestar.
Muchas veces responsabilizamos a los otros del cuidado de nuestra salud y en realidad día a día somos nosotr@s (sin que nos demos cuenta) los que tenemos las armas para potenciarla o debilitarla.
Por eso es importante que empieces a tener una escucha activa de tu cuerpo, tus pensamientos, sentimientos y malestares.
Durante tu vida pasas por muchas situaciones que pueden generar estrés.
La diferencia radica en trabajar para convencerte de que tienes herramientas para superarlas. Si las enfrentas con este convencimiento todo tu cuerpo te va a acompañar en la batalla.
Si tú tienes otros métodos, difúndelos a través de los comentarios. Seguro ayudarás a otros.